(Fotos: Festival Internacional de Jazz de Montréal)
Alejandro y Esteban Gutiérrez son dos hermanos músicos que viven en Zúrich, hijos de un padre suizo y una madre ecuatoriana. Desde 2015, lideran un dúo instrumental a dos guitarras que revitaliza la estética sonora de la música latina de los años 50.
Hasta la fecha, han cosechado una gran acogida a nivel internacional con su propuesta, presentándose en el Tiny Desk de NPR y en grandes festivales de música como el Festival de Jazz de Montreal. De hecho, el pasado 29 de junio, el dúo se presentó en el Club Soda de Montreal con motivo de este festival, donde sedujeron a la audiencia con los hipnotizantes sonidos de sus guitarras.
El ambiente no podía ser más propicio: algunos de pie, otros sentados en las barras laterales del Club Soda, los asistentes disfrutaron de más de una hora de melodías instrumentales de los Hermanos Gutiérrez.
Alejandro y Esteban, vestidos uno de blanco y otro de negro, respectivamente, reconocieron desde el inicio al público de Montreal como "la audiencia más ruidosa" ("the loudest crowd") que jamás habían tenido en sus conciertos. Así, intercalando entre el inglés, el francés y el español en cada comentario que hacían, los hermanos se sintieron como en casa en esta ocasión.
Con la delicadeza de los toques psicodélicos en sus guitarras, los Hermanos Gutiérrez llevaron a cada uno de los asistentes a un trance musical. El dúo navegó desde sus inicios, con temas propios como "La venganza" y "El jardín", hasta su álbum de estudio más reciente, "El bueno y el malo".
Demostraron ser, textualmente, un "dúo dinámico", jugando entre la intimidad y la intensidad en cada una de sus canciones, entre el silencio y la adrenalina del sonido.
