La fibra es un conjunto de sustancias que obtenemos de los alimentos que consumimos pero que no podemos digerir en el estómago ni en el intestino delgado. Algunos tipos de fibra son fermentados por bacterias en el intestino grueso y otros simplemente son desechados. Principalmente obtenemos la fibra de frutas, verduras, granos enteros y de leguminosas. La fibra es una parte muy importante de una dieta saludable.
La fibra le agrega volumen a la dieta y ayuda a que sintamos saciedad más rápidamente por lo que nos sirve para no comer de más y así poder mantener nuestro peso. La fibra ayuda a la digestión, a prevenir el estreñimiento, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
RECOMENDACIONES:
- La cantidad mínima diaria recomendada es de 15 gramos por cada 1000 calorías, es decir, aproximadamente 30 gramos para adultos.
- Una forma de calcular la cantidad diaria recomendada para niños a partir de los 2 años es sumar 5 gramos a su edad en años.
- Desafortunadamente, en la actualidad la dieta promedio generalmente no llega a lo recomendado diariamente por lo que es muy aconsejable hacer lo posible por cambiar nuestros hábitos y acostumbrarnos a consumir alimentos tales como frutas, verduras, cereales integrales y leguminosas como el frijol o la soya.
- Agrega la fibra a tu dieta progresivamente hasta llegar a la cantidad diaria requerida.
- ¿Y cómo sabemos cuántos gramos de fibra contiene un pan o un vegetal? Te aconsejo poco a poco familiarizarte leyendo las etiquetas de los alimentos.
Amigo lector, el agua ayuda al paso de la fibra a través del aparato digestivo, por lo que te invito a tomar muchos líquidos, al menos 8 vasos de agua al día, junto con alimentos como frutas, verduras, cereales integrales y leguminosas. Te veo en mi próxima edición. Con el gusto y cariño de siempre Carmen Serdán (serdancar@hotmail.com). Recibe un abrazo.
CONSEJOS Y COMENTARIOS DE CARMEN SERDÁN:
- La linaza o semilla de lino es rica en fibra. Contiene de los dos tipos de fibra, un por ciento de fibra soluble y otro de fibra insoluble.
- No olvides hacer tu ejercicio físico. Trata de lograr por lo menos 30 minutos al día de ejercicio ligero como caminar. Estaciona el coche en el lugar más alejado del estacionamiento. Haz jogging diariamente o practica zumba, spinning o bicicleta estática en tu club deportivo o gimnasio que te quede cerca de casa o lugar de trabajo.
- Si nos es imposible obtener toda la fibra que necesitamos de los alimentos, antes de recurrir a los suplementos que se venden en tiendas naturistas y supermercados, consulta a tu médico o nutriólogo de confianza.
- Consume granos o cereales que sean integrales o enteros. Opta por mucha fruta y verdura. También incluye en tu dieta, leguminosas como frijol, soya, lenteja.
- El agua y las infusiones o tés son excelente opción para ayudar a la fibra a que cumpla su función de favorecer la buena digestión.
- El hecho de que los alimentos digan en sus etiquetas “ricos en fibra” no quiere decir siempre que sean completamente saludables o que no nos harán subir de peso, así que ojo con la mercadotecnia.
- Si te recomiendan fibra para combatir el estreñimiento, procura consumir fibra natural, y no laxantes que te pueden dañar tu sistema digestivo.
- El exceso de fibra tampoco es aconsejable y menos sin el consumo de líquidos.