PREGUNTA: Si voy conduciendo y me detienen en un retén de control policial, ¿pueden detenerme si soy indocumentado?
RESPUESTA: Una de las épocas más peligrosas del año para las personas que se encuentran indocumentadas en el Área Metropolitana de Toronto es la época de Navidad.
Durante esta temporada la policía lleva a cabo campañas de prevención y monitoreo de conducción bajo los efectos del alcohol y las drogas, y todas las noches se establecen puestos de control en distintas zonas de la ciudad.
Si bien es cierto que Toronto fue designada como ciudad santuario, y por lo tanto ninguna agencia ni institución del gobierno puede preguntar acerca del status migratorio de una persona, también es cierto que esta norma es válida para la policía, únicamente cuando ellos no tienen indicios de que quien tienen al frente esta indocumentado o tiene una orden de detención. En otras palabras cuando no hay un reporte previo por parte de la Agencia de servicios Fronterizos de Canadá (CanadaBorderServices Agency CBSA).
Cuando una persona ha solicitado refugio en Canadá y su caso ha sido negado, cuando ha sido detenido por inmigración en algún momento o cuando ha sidoreportado a Inmigración, normalmente por algún “amigo”, y se le ha extendido a esta persona una orden de deportación con la que no ha cumplido, CBSA transmite la orden de detención a la policía.
En los puestos de control de conducción bajo los efectos del alcohol y las drogas, la policía con frecuencia solicita con frecuencia los documentos de identidad de todas las personas que se encuentren en un vehículo que ellos sospechen está siendo conducido por una persona que sobrepasa el límite máximo de consumo de alcohol. Si al confrontar las identidades de los ocupantes del vehículo contra la lista de órdenes de detención de inmigración la policía se encuentra con que hay uno o varios de los ocupantes que están siendo solicitados por inmigración, están en la obligación de detenerlos y entregarlos directamente a oficiales de CBSA que se encargaran de la deportación.
Pero no solo es diciembre una época peligrosa para quienes se encuentran indocumentados, es también peligrosa para quienes dejándose llevar por las festividades consideran que una copa de licor por encima del límite permitido no es mayor problema. Conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas puede acarrear consecuencias serias, como, por ejemplo la remoción de la residencia permanente y la deportación de Canadá para aquellas personas a las que la policía les ponga cargos criminales bajo esta sección del código criminal o puede hacer inadmisibles a Canadá a quienes en algún momento soliciten la residencia permanente en Canadá independientemente del programa a través del cual lo hagan.
La recomendación para esta época del año es siempre la misma, no dejarse llevar por el ambiente de fiesta hasta el punto de olvidar cuales pueden ser las consecuencias. Para aquellos que se encuentran indocumentados lo mejor es que se mantengan alejados de cualquier situación que los pueda poner en contacto directo con la policía. Para aquellos que aún no son ciudadanos canadienses la recomendación es cumplir las leyes al pie de la letra, porque aun la residencia permanente le puede ser revocada a quien se le pongan cargos criminales y por cargos criminales debe entenderse no sólo el asesinato, el tráfico de drogas o el robo sino también la violencia doméstica o conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas.
