¿Nunca compraste una casa? Se podría pensar que el primer paso para comprar una casa es consultar los lugares. Pero es importante tomar algunas medidas para prepararse antes de sumergirse en la búsqueda de una casa e ir a jornadas de puertas abiertas todos los fines de semana.
Algunas de las cosas que debes pensar es en cómo conseguir una cuota inicial, cómo obetener una nota crediticia óptima y cuál es el monto máximo al que podrías acceder para la compra de una casa.
Es por eso que conversamos con Fiorella Piccini y su equipo, asesores financieros, que nos dieron los mejores consejos para compradores de vivienda por primera vez con los que te asegurarás tomar la mejor decisión financiera e inmobiliaria.
Consejo 1: Ahorra para tu pago inicial y costos de cierre
El primer paso para comprar una vivienda es aumentar tus ahorros, ya que un pago inicial más grande significa menos préstamo necesario. Ahorrar te prepara para los gastos asociados con la compra, como los honorarios legales, costos de cierre (que representan aproximadamente el 2-3% del precio de compra) y gastos de mudanza.
Puedes empezar creando un presupuesto y ahorrando cada mes, incluso cantidades modestas como $100 pueden acumularse rápidamente. Considera opciones como redondear tus compras o poner ingresos inesperados en tus ahorros para el pago inicial.
Además, con al menos un 20% de pago inicial, evitas pagar primas de seguro hipotecario por incumplimiento, requeridas por el Gobierno de Canadá cuando el pago inicial es menor al 20% para una hipoteca convencional.
Consejo 2: Conoce cuánto puedes pagar
Los prestamistas (como tu banco) típicamente calculan tu capacidad para pagar una hipoteca en función de los principios tradicionales de deuda-ingreso relacionados con tus costos mensuales de vivienda, tu ingreso bruto mensual y todas tus demás obligaciones de deuda, incluyendo préstamos, tarjetas de crédito y pagos de arrendamiento. También es importante entender las reglas hipotecarias canadienses en torno a cosas como la prueba de estrés hipotecario y tu relación deuda-ingreso.
