Si vemos el punto positivo del confinamiento, es que nos habrá empujado a adoptar nuevas medidas y formas de hacer las cosas, a menudo más productivas y en menor contacto con el dinero en efectivo por ejemplo, lo cual ha pasado a la historia. Solo será una pieza de museo como muchas otras cosas que fueron llegando a su fin o su periodo de obsolescencia. En el sector inmobiliario, estos cambios podrían convertirse en la norma para siempre.
Desde el 20 de abril, el gobierno provincial ha comenzado a autorizar actividades relacionadas con el corretaje de bienes raíces, en particular para transacciones relacionadas con la toma de posesión o la mudanza antes del 31 de julio de 2020. Esta autorización también llego a lo que se refiere a las inspecciones de edificios en servicios residenciales, como también a los topógrafos.
Sin embargo, las populares visitas libres siguen prohibidas hasta nuevo aviso. ¿Hasta cuándo? Por el momento, es difícil de predecir. Pero cuando se levanten las medidas de prevención, muchos compradores y vendedores continuarán queriendo protegerse del virus. Otros se habrán adaptado a nuevas y más eficientes formas de llevar a cabo sus transacciones inmobiliarias.
Distanciamiento social: La nueva conducta social vuelta Norma Rigurosa
Varios observadores creen que la crisis del coronavirus provocará un cambio profundo en el mundo del trabajo; después de ser forzados a trabajar a distancia, muchos trabajadores y empleadores adoptarán esta forma de trabajo, como ya muchas empresas y escuelas superiores han optado por esta solución para que nadie se vea perjudicado.
En el sector inmobiliario, está ocurriendo el mismo fenómeno. Las herramientas hasta ahora consideradas a veces exageradas o innecesarias serán muy útiles y sobretodo serán de RIGOR. Las visitas virtuales se están volviendo más populares, al igual que los constructores muestran todos los modelos de unidades y planos tridimensionales, las videoconferencias, las llamadas en conferencia, los formularios electrónicos y las soluciones de firma electrónica, bajo plataformas muy seguras.
Las visitas libres, pasaran a ser una visita virtual con video llamada o videos tridimensionales. En lugar de visitar cinco o diez casas que le interesan, puede hacerse una buena idea o filtrar consultando modelos tridimensionales. La representación es similar a la realidad y puede "caminar" a través de la propiedad como si realmente estuviera allí. Luego puede dedicar sus visitas en persona a dos o tres casas que realmente le interesen. Por lo tanto, este tipo de tecnología le permite ahorrar tiempo y ahorrar sus esfuerzos.