Fotos: Tamara Engler
Si has tenido la oportunidad de estar en otras tierras diferentes a la tuya, sabrás que puedes conocer gran parte de una cultura a través de la comida, la música, los bailes y la manera que tienen las personas de celebrar.
Todo eso es justamente lo que puedes encontrar en Weekends du Monde, un festival multicultural que ofrece la posibilidad de viajar fugazmente por diferentes países a través de los sentidos, y que el pasado sábado inició una nueva edición en el Parc Jean Drapeau.
Lo interesante de este encuentro, es que cada país invitado cuenta con un espacio y un escenario propios dentro del Espace 67, permitiendo la coexistencia de diferentes festivales separados entre sí.
Fue gracias a eso que de pronto, y sin saber muy bien a lo que iba, me vi entrando en un agitado submundo de rancheras mexicanas y tacos al pastor entre los árboles, para luego salir y encontrarme un poco más allá con un pequeño paraíso de dulces almendrados, dátiles y suaves melodías tunecinas.
Sorprendida por los contrastes, me fui alejando de ese calmo y tradicional mundo árabe hasta toparme de golpe con el ímpetu de un baile folklórico sobre el escenario salvadoreño, alentado por un entusiasta público agitando banderas con fervor patriota.
En definitiva, una divertida experiencia llena de sorpresas y diversidad que, gracias a una producción atractiva, es el panorama ideal tanto para quienes buscan reconectarse con sus raíces como para aquellos que deseen curiosear y aprender acerca de otras culturas.
Además de bailes, música, shows y una variada oferta culinaria, hay rincones creados exclusivamente para los niños, con juegos inflables, pequeñas canchas de fútbol y diversas actividades interactivas en donde aburrirse no es una opción.
