La primavera llega a la ciudad de Montreal con un sinfín de actividades. Hoy te quiero hablar de dos: la visita a un bazar de antigüedades llamado “Oldwig”, y los 21 columpios musicales.
Ubicado en las instalaciones de una antigua piscina, el Oldwig contó con su última edición este fin de semana. En esos espacios teníamos la oportunidad de ver y probar la ropa y la decoración de más de 30 expositores que nos deleitaron con modas de los 50, 60 y sobretodo de los 80 y 90. Cuando te paseas por los kioscos y ves ropa que tú te ponías no hace mucho tiempo atrás, es cuando te das cuenta que lo vintage no es ni tan antiguo ni tan vintage como te parecía hace un tiempo. Me probé lentes, sombreros, zapatos extravagantes y hasta vestidos plateados y de terciopelo de esos típicos de fiesta de 15 años.
Un Dj amenizaba la tarde así que aquello se convirtió en una reunión de amigos/fiesta de disfraces. Mis hijas encontraron camisetas y vestidos a precios increíbles y yo terminé de pasar el tiempo hablando y espiando a la gente la cual iba y venía con "pintas" bastantes particulares.
De ahí, nos fuimos a la plaza de los espectáculos (Place des Arts) ya que quería probar los famosos columpios musicales. Si recuerdas bien, durante el invierno te hablé de la luminoterapia con unos balancines musicales que se iluminaban (El arte de la luminoterapia). Pues bien, en la misma zona han instalados 21 columpios que de acuerdo a su " ir y venir" emiten sonidos musicales. La idea es conseguir varios columpios alineados para generar algo parecido a un ritmo melodioso. Nosotros no logramos tanto como una canción; sin embargo, te puedo garantizar que la experiencia es muy relajante, divertida y para todas las edades!
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Publicado: 25/04/2016