La solicitud de refugio es una de las figuras que más ayuda a las personas provenientes de lugares con conflictos bélicos o sociales, o problemas políticos y económicos extremos a permanecer legalmente en Canadá, pero en diversas ocasiones la solicitud de refugio es rechazada, por lo que los postulantes deben pensar en una forma diferente de permanecer en el país.
Una de las opciones que se suele usar es el de Humanidad y Compasión, un proceso que no es sencillo pero que bien pensado puede funcionar para conseguir la residencia. Más allá de todo, es importante saber que solicitar la residencia por Humanidad y Compasión solo puede hacerse pasado un año desde que fue rechazada la solicitud de refugio.
Existen solo dos casos excepcionales en los que una persona puede solicitar Humanidad y Compasión inmediatamente después de recibir la negativa de refugio: el primer caso se aplica para aquellas personas que estén a cargo de menores de edad, quienes puedan verse afectados por la decisión de salida del país, y el segundo caso cuando una persona con algún tipo de condición médica que no pueda ser atendida en el país de origen.
Anualmente se aceptan en promedio 3500 personas por Humanidad y Compasión, llevando a una familia de 4 integrantes a llevarse 4 de dichos cupos. Se trata de un proceso complicado pero que con la asesoría adecuada puede brindar los resultados que se buscan originalmente: la residencia en Canadá.
Si quieres iniciar algún proceso de inmigración en Canadá, no procedas sin asesoría. Recurre a Claudia Palacio de Palacio Immigration Consulting.
(Foto: senivpetro)
