Las puertas para nuevos inmigrantes que quieran comenzar una nueva vida en Canadá se reabren de nuevo a partir del sábado 4 de mayo, cuando el Gobierno de Canadá acepte por fin nuevas solicitudes para el Programa Federal de Trabajadores Calificados (FSWP, por sus siglas en inglés).
El programa incluirá 24 profesiones para las que se puede solicitar una plaza para inmigrar, entre las que destacan los ingenieros y los tecnólogos médicos, pero la agencia estatal Citizepship and Immigration Canada (CIC) solo aceptará un cupo de 5.000 solicitudes o al año y un máximo de 300 por cada una de las profesiones que compone esa lista.
Sin embargo este nuevo plazo solicitará requisitos más estrictos como tener menos de 35 años, al menos un año de experiencia en la profesión solicitada y mejor nivel de idiomas, entre otros, con el objetivo de que "no solo se seleccionen a los inmigrantes que más necesita la economía canadiense, sino también los mejor posicionados para el éxito", según el ministro de Inmigración de Canadá, Jason Kenney.
"La primera prioridad del gobierno es la de asegurar trabajo, crecimiento económico y prosperidad a largo plazo. Por eso, las mejoras en el FSWP han llegado a través de un estudio y un extensivo programa de evaluación", señaló el ministro.
El objetivo ha sido actualizar los criterios de selección para mejorar los resultados económicos al seleccionar inmigrantes que serán capaces de integrarse lo más rápido y exitosamente posible en la economía de Canadá.
Estos cambios están apoyados por el Canada's Economic Action Plan de 2013 para crear un sistema de inmigración más rápido y flexible cuya meta principal es concentrarse en las necesidad del mercado de trabajo para mejorar la economía del país, y uno de esos cambios es también el Educational Credential Assessment, que convalidará los títulos académicos con equivalente en el sistema educativo de Canadá.
De esta forma se prevé que la lista de espera para procesar las solicitudes disminuya en menos de un año de espera ya que el Gobierno canadiense cree que de no haber aplicado estos cambios, el número de solicitantes para inmigrar habría sobrepasado el millón y medio y el tiempo de espera sería de 15 años.