Los colores del otoño han llegado a Montreal y con ellos, la oportunidad perfecta para disfrutar de la ciudad en su versión más mágica. Entre hojas doradas, aire fresco y paisajes de postal, la metrópoli ofrece rincones donde se puede vivir la esencia de la temporada sin gastar un solo dólar.
Ya sea para caminar, tomar fotos o simplemente disfrutar de un café con vista a los árboles, estos lugares te invitan a redescubrir Montreal con los sentidos bien despiertos. Lo mejor: todos son de fácil acceso y no necesitas conducir para llegar.
El encanto del otoño sin salir de la ciudad
Montreal se transforma durante el otoño en un escenario lleno de tonos cálidos y atmósferas acogedoras. Es la época ideal para salir a pasear, respirar aire fresco y reconectar con los espacios naturales que dan vida a la ciudad. Desde parques históricos hasta calles con encanto europeo, cada rincón tiene algo que ofrecer a quienes buscan inspiración y calma.
- Parc Jean-Drapeau
Un oasis de naturaleza en pleno corazón urbano. Durante el otoño, los senderos del Parc Jean-Drapeau se tiñen de tonos dorados y rojizos, ofreciendo una experiencia visual única. Además, puedes recorrer gratis el famoso Circuit Gilles-Villeneuve, el mismo donde se celebra la Fórmula 1, caminando o en bicicleta mientras disfrutas de las vistas al río y al skyline de Montreal.
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- Marché Atwater y Canal de Lachine
Si hay un lugar que resume el espíritu otoñal, es este. En el Marché Atwater encontrarás calabazas, manzanas, maíz y flores de temporada. Luego, solo cruza la calle para caminar o pedalear junto al Canal de Lachine, un recorrido clásico donde los reflejos del agua se mezclan con los colores del follaje.
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- Mont Royal y Lago de los Castores (Beaver Lake)
El Mont Royal es un imperdible en cualquier estación, pero en otoño se convierte en pura magia. Desde el mirador Kondiaronk podrás disfrutar de una de las vistas más impresionantes de la ciudad, y al bajar, el Lago de los Castores ofrece un entorno tranquilo para relajarte o tomar fotos espectaculares.
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- Old Montreal
Caminar por sus calles empedradas y edificios históricos es como viajar en el tiempo. Con los árboles cubiertos de hojas doradas y las fachadas iluminadas por la luz suave del atardecer, el Viejo Montreal es el lugar ideal para paseos sin prisa y fotos que parecen sacadas de una postal.
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- Avenue Duluth y Parc La Fontaine
Perfecto para los que buscan un ambiente más bohemio. Recorre la Avenida Duluth con sus cafés y boutiques locales, y termina el paseo en el Parc La Fontaine, donde los senderos bordean lagos rodeados de árboles en pleno esplendor otoñal. Ideal para una tarde tranquila con un café caliente en mano.
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